La competencia entre aeropuertos puede ser factible, aunque se recomienda analizar en cada caso el alcance de esta competencia y en algunos aeropuertos puede persistir la necesidad de regulación. Esta es la principal conclusión de la jornada Conference on Airports Competition (Barcelona, 19 de noviembre), organizada por el Institut d’Economia de Barcelona y la Cátedra FEDEA-Abertis.
En su ponencia, el profesor H.M. Niemeier (Universidad de Bremen) afirmó que los aeropuertos compiten entre sí en distintos segmentos de mercado: por atraer tráfico tanto en los mercados locales con áreas de atracción solapadas, como por el tráfico de conexión –competencia entre hubs- , por la carga aérea o por atraer las bases de compañías aéreas. No obstante, dadas las características tecnológicas de los aeropuertos, la competencia no siempre es factible. Existe evidencia de competencia entre aeropuertos de tamaño pequeño o medio; por ejemplo, entre los aeropuertos del Reino Unido y, en menor medida, entre los alemanes. Sin embargo, los aeropuertos de mayor tamaño pueden disfrutar de poder de mercado. Por ello, la posibilidad de competencia entre aeropuertos debe ser valorada caso por caso.
De acuerdo con lo anterior, el profesor Peter Forsyth argumentó que en los casos que la competencia es intensa, la regulación es innecesaria. Frente a posibles situaciones de poder de mercado, la regulación debe diseñarse de tal manera que fomente la competencia, evitando restricciones que la impidan. La competencia puede ser incentivada por políticas dirigidas a la liberalización de los acuerdos bilaterales internacionales, la reducción de la integración entre aeropuertos y el impulso del mercado de slots.
Al mismo tiempo, es preciso evitar aquellas actuaciones de política pública capaces de distorsionar la competencia en el mercado. A partir del análisis de la situación en Canadá y Estados Unidos, el profesor Mike Tretheway presentó las posibles fuentes de distorsión de la competencia. Argumentó que las políticas de marketing llevadas a cabo por los aeropuertos pueden ser positivas para la competencia. En el caso de ayudas públicas, se precisa una evaluación rigurosa que evite posibles distorsiones en el funcionamiento del mercado. M.Tretheway trató, asimismo, el tema de la privatización en bloque frente a la privatización individual de aeropuertos. Indicó que la primera opción garantiza los mayores ingresos derivados de la venta, aunque, si lo que se desea es conseguir mejoras de eficiencia, lo indicado es privatizar de manera individual fomentando la competencia entre aeropuertos.
La jornada concluyó con una mesa redonda sobre el desarrollo de rutas en aeropuertos. En la misma participaron miembros del Comité de Promoción de Rutas del Aeropuerto de Barcelona así como varios de los ponentes mencionados y un representante de Abertis Airports (Bob Bullock). Se pusieron de manifiesto las razones que justifican la necesidad de promover dichas rutas en mercados aeroportuarios sujetos a un mayor grado de competencia y los factores que determinan su efectividad.