Los grandes municipios españoles se enfrentan a la problemática de tener unas características muy distintas entre ellos no reconocidas en el sistema de financiación. Así, el análisis del gasto e ingreso per cápita de los municipios mayores de 75.000 habitantes pone de mani esto que no existe una relación positiva entre el gasto o ingreso municipal y el tamaño de la población. En cambio, sí se evidencian importantes diferencias entre municipios con igual población, lo que hace pensar que hay otros factores que determinan sus necesidades de gasto.