El proceso de globalización ha incrementado la movilidad de las empresas más allá de las fronteras estatales. De hecho, la combinación de empresas multinacionales, un bajo nivel de armonización fiscal y un sistema imperfecto de intercambio de datos fiscales entre países ha tenido consecuencias importantes en la tributación aplicada a las empresas. Hoy en día es más que evidente que la tributación de las multinacionales es un tema que suscita inquietudes entre la opinión pública. Por ejemplo, en España, empresas como Apple, Google y Amazon pagan una factura fiscal sorprendentemente baja, lo que claramente llama la atención de los medios, y en el Reino Unido, el público ha boicoteado a Starbucks por sus prácticas de elusión fiscal. Al mismo tiempo, se han registrado una serie de respuestas en forma de políticas: algunos países han aprobado iniciativas para restringir las prácticas de elusión fiscal de las grandes empresas, y la Comisión Europea, por su parte, está luchando contra los acuerdos entre algunas grandes compañías y paraísos scales4.