Las ciudades son un invento de la humanidad que facilita la interacción entre las personas. La vida urbana nos hace más productivos porque nos permite aprender cosas unos de otros y especializarnos en tareas más específicas. Más recientemente, las ciudades también se han convertido en lugares donde la gente quiere vivir para disfrutar de una mayor diversidad de experiencias y servicios, como los culturales o los astronómicos, por mencionar solo dos ejemplos. La pandemia causada por el SARS-CoV-2 ha desactivado estas ventajas propias de la vida urbana, aunque sea de forma temporal y parcial.