El conocido «Teorema de la descentralización» (Oates, 1972) establece la superioridad de la provisión pública descentralizada en relación a la centralizada, pues ésta última no es tan sensible respecto de la diversidad de preferencias sobre los bienes y servicios públicos que pueden existir entre territorios. En este artículo, contrastamos esta hipótesis a partir de una muestra de datos que, por un lado, ofrece información sobre inversión en infraestructuras en carreteras y en educación y, por el otro, sobre los stocks regionales de capital antes y después de la descentralización de tales competencias de gasto. Los resultados del análisis demuestran que la inversión realizada en ambas categorías de gasto es mucho más sensible al output regional y a los costes y número de usuarios de los servicios respectivos cuando los gobiernos subcentrales tienen la competencia de inversión.